Paginas de mi Moleskine
14 septiembre 2007
Marcas, naciones y Turquia
Estambul no me gustó. Ya lo conocía. Hace tres años. Y ha cambiado, a peor, claro. Si turquía me parece una nación en pleno momento de adaptación y conciliación entre el islam y europa (que dios les coja confesados... :) Estambul me parece la cueva de ali-baba.
Y es que el status quo planteado de "yo te robo-tu me robas" mantiene un equilibrio ficticio de alegalidad muy gracioso. Es algo así como si los ocho millones de hijos del lazarillo de tormes se hubieran ido a vivir alli. El problema está cuando viene un turista: elemento nuevo y novato en ese equilibrio robil. Y el taxi te engaña, el de la tienda te engaña. en el hotel te tratan mal...
Lo de las marcas es muy gracioso. De cocacola no es solo el logotipo, sino su color rojo o la botella de cristal de sinuosa figura. De un coche, el olor a nuevo o el ruido que hace una puerta al cerrar... y no solo la forma estrellada del llavero, Por mucho dinero que gaste turquía en campañas de publicidad, su verdadera marca es lo que el turista experimenta con el pais: su embajador es el taxista. Por bizarre que parezca.
Un consejo: si vas a Estambul acepta que te van a robar. Y no te molestes. Si puedes, robar tu: hazlo. Algún dios te perdonará, seguro. :)
Y es que el status quo planteado de "yo te robo-tu me robas" mantiene un equilibrio ficticio de alegalidad muy gracioso. Es algo así como si los ocho millones de hijos del lazarillo de tormes se hubieran ido a vivir alli. El problema está cuando viene un turista: elemento nuevo y novato en ese equilibrio robil. Y el taxi te engaña, el de la tienda te engaña. en el hotel te tratan mal...
Lo de las marcas es muy gracioso. De cocacola no es solo el logotipo, sino su color rojo o la botella de cristal de sinuosa figura. De un coche, el olor a nuevo o el ruido que hace una puerta al cerrar... y no solo la forma estrellada del llavero, Por mucho dinero que gaste turquía en campañas de publicidad, su verdadera marca es lo que el turista experimenta con el pais: su embajador es el taxista. Por bizarre que parezca.
Un consejo: si vas a Estambul acepta que te van a robar. Y no te molestes. Si puedes, robar tu: hazlo. Algún dios te perdonará, seguro. :)
Etiquetas: marketing y publicidad, Taxis, turquia